Conforme avanza la trama de «Nueve perfectos desconocidos», aquellos que abominamos la idea de los retiros espirituales y de bienestar y todo lo que eso conlleva, al fin comprendemos que no se trata de una apología de dichas prácticas, sino de una crítica feroz, puntual, elegante y sarcástica de las mismas 

Por ANDRÉS TAPIA